jueves, 28 de junio de 2012

Bienvenida a los "Tas"


No estoy hablando de Taz, el demonio de Tasmania. Aunque a veces siento que me parezco a él… ¿acelerada por hacer muchas cosas?. No, que va!, me devoro lo que me ponen enfrente y no puedo dejar de comer.

Tas: llegué a los treinTAS, y desde hace mas un año dejé los maravillosos veinTES, y a partir de aquí serán los maravillosos TAS: treintas, cuarentas, cincuentas, sesentas, setentas, ochentas, noventas… ¿Qué pasará cuando llegue a los cien?, no lo sé pero ten por seguro que cuando llegue a los ciento nueve escribiré como titulo del post: me109cita.

Ya por mi experiencia hay cosas que a mi edad puedo “presumir”:
Tuve un amor infantil (Luis),  un amor juvenil (otro Luis), un amor frustrado (Jonathan), un amor de novela (Christian), un amor platónico (Kurt Cobain), dos amores extranjeros (Roger Schwartz y James Sargent), un amor apache (La Vaca), un amor rockero (Carlos), un amor virtual (Muso 4) y un amor dida (Goyo).

A mis 31 años ya estuve en una autopsia, en una balacera, en el CE. RE. SO., en un “teibol” y en un baile de la Arrolladora. Sí, en ese orden cronológico, y por extraño que parezca el baile de la arrolladora fue lo que mas miedo me dio.

En una autopsia: Fue casi entrando a la universidad, me invitaron los chicos de la carrera de Derecho para ir a la morgue a hacer una práctica de dictamen de causas de muerte. ¿Me invitaron? Si, recordemos que en ese entonces yo era darketa, y la invitación para hacer una autopsia fue para mí como lo es para ti una invitación al cine. Cuando entramos a la morgue éramos como 45, y en cuanto salió el olor del fétido cuerpo recién cortado solo quedábamos 15, los demás habían salido a vomitar mientras en el alboroto yo trataba de robarme dos falanges para hacerme unos aretes. Pensé en robarme la cabeza  y encogerla como lo hacen los Indios Shuaras y usarla de amuleto, pero intuí que robarme un dedo sería menos notorio.


En una balacera: estaba esperando el verde en el cruce de Saavedra con Torres Landa. De repente comencé a escuchar cuetes de fiesta de templo, y yo pensé: -¿cuetes de fiesta de templo a las dos de la tarde un martes?, pero lo que mas me intrigó era que la gente se agachaba al asiento del copiloto, y yo pensé: -¡que depravados, mira que ponerse a hacerle un wawis al acompañante!... y luego pensé: -seeeee, que raro ¿todos al mismo tiempo?. Y en eso pasaron casi volando una Tahoe blanca perseguida por varias patrullas. Pues no, no eran cuetes, eran balazos y tampoco eran wawis, se estaban cubriendo de una bala perdida.

 En el CE. RE. SO.: me desempeñaba en el área de capacitación para el trabajo de Gobierno del Estado, promoviendo la impartición de cursos para diferentes sectores de la población, dirigidos a incrementar las habilidades laborales, más específicamente, habilitar a la gente al enseñarle un nuevo oficio. El problema era la deserción y falta de recursos. La mayoría de la gente justificaba sus inasistencias por tener que cuidar a sus hijos, falta de tiempo, falta de espacio, falta de maquinaria. Y para completar la meta de capacitación para ese año decidimos enfocarnos a grupos cautivos…literalmente. Por eso fuimos al Centro de Readaptación Social a ofrecer los cursos de capacitación, pero como tampoco tenían maquinaria ni materiales para cursos de carpintería o corte y confección, a la inteligente de mi jefa se le ocurrió hacer un ofrecimiento formal para un curso que no requería mucha inversión, así que al director del penal le propuso adiestrar a los reos en… cerrajería.

Un Teiboldans: Sí, también fui parte de la mesa, mesa, mesa que mas aplauda, hace muchos años, y contrario a lo que puedas pensar, no fui a bailar, fui a ver como era. Todos los hombres que conocía se alborotaban como pavorreales al platicar orgullosamente que habían ido a un teibol a ver a las teiboleras. ¿Qué tiene de atractivo?, ps según ellos los malabares y giros exóticos que hacen en el tubo. Y casi me las podía imaginar como las artistas del Cirque du Solei pero en pelotas. Así que para salir de la duda, en una noche de peda mis amigos me llevaron al “coliseo”, allá por la salida a San Felipe, y oh sorpresa, había una chica desnuda bailando junto al tubo, ni siquiera estaba haciendo malabares y giros exóticos, simplemente estaba encuerada.  Uyyyy, que novedaaaad, enséñenme algo que no haya visto. Si hubiera querido ver mujeres encueradas hubiera ido a las duchas en “Villa Raspa”, un conocido balneario en Villagrán (es que cuando fui estaba tan gacho que las regaderas ni tenían puertas). Reflexiono que posiblemente esas “teiboleras” usaban el desodorante “inglich leidi”, del que anuncian en la tele, y por eso toda la bola de pelmazos las veían como unas eminencias del baile exótico. Total que solo pude permanecer cinco minutos adentro del tugurio porque nos avisaron que estaba por llegar Fiscalización y me iban a requerir mi “permiso para ejercer”, o de lo contrario me meterían al bote al no poder comprobarles que yo no era una de las chicas “de la variedá”.

La rola que bailaba la chica junto al tubo

En un baile de la Arrolladora… que miedo, para mayor información lee mi post “la banda del limón arrollado”, que está por el mes de noviembre del año pasado.


http://dulcineadelrebozo.blogspot.mx/2012/01/la-banda-del-limon-arrollado.html

A mis treinta y uno ya pasé por: un embarazo, una cesárea, un tatuaje, varias devaluaciones, dos años de psicoterapia, viajes por carretera, tifoidea, varicela, una congestión alcohólica, campamentos con los Scouts, una manifestación, una peregrinación, un viaje de mota, un viaje en moto, un corazón roto, una perforación en la lengua y otra en el cártilago de la oreja izquierda (la del cartílago me dolió más), un concierto de Roger Waters, cuatro endodoncias, y un lavado de estómago por una despistada sobre ingesta de medicamentos que mi familia confundió con un intento de suicidio.  (Despistada sobre ingesta de medicamentos con todo y fondo musical)


Fondo musical de la despistada sobre ingesta de medicamentos.


 Dicen que antes de morir debemos tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro, yo ya planté un árbol, ya tuve a una hija, y, con respecto a lo del libro…¿el blog cuenta?

 ¿ya me puedo morir?, nel, ahora no quiero, y es porque precisamente a estas alturas mi vida se está poniendo interesante, ya estoy amando a mis traumas irracionales, descubrí que no puedo vivir sin ellos, ni luchar en contra tampoco. Eso de los cursos de autoestima, en los que dicen que hay que comenzar a autoconocerse, para luego autoaceptarse, para luego autoquererse, para luego autorresignarse, para luego autohacerseelamor … mis calzones!!!, ahora solo me falta pegar en el coche una calca que diga YO MI BIPOLARIDAD, entre las calcas que dicen “no soy chilango, así manejo” y “no sé karate, pero sé putazos”, y es que a mi bipolaridad sencillamente la amo. Durante mi adolescencia me hicieron tomar muchos cursos de autoestima y mucho prozac. Ahora entiendo es que esos cursillos no valen la pena, porque no hay como vivir para experimentar, no hay como el placer de darse de topes en la cabeza, de fallar y caerse para luego levantarse, reconocer que soy falible y me equivoco, y luego sentirme que soy chingona, y que a pesar de eso aún me hacen falta muchas cosas por aprender. Lo mejor de todo es que ahora sé que cuento con personas que no dudarían un segundo para tenderme la mano, que me ayudan y que me quieren (gracias  Prima Vero, y Tia Gela, no sabía que leyeran mi blog).

El aprendizaje es arduo y tiene muchas recompensas, pero también un precio: aprender me ha costado sudor y sangre, lo bueno es que lo de la sangre lo he pagado en cómodas mensualidades.

Curiosamente todos los días cuando me levanto y me miro al espejo me veo a mi misma más bonita que cuando tenía veinte, mi belleza se ha incrementado con la edad y casualmente mi graduación de anteojos también aumentó.

 Y eso me lleva a algo que debo reconocer, achaques de los Tas: la gastritis, bueno, esa la padezco desde los 18, pero yo pensé que se me iba a quitar con el tiempo, no que se me iba a hacer mas severa, sin embargo, creo que la raíz de mi gastritis es psicótica, digo, psicosomática, bueno, para el caso es lo mismo porque dejaron de darme crisis gástricas cuando maté a la vaca.

Mi pelo comienza a caerse, de hecho siempre se me ha caído, pero ahora que ya no vivo junto a alguien que también tiene el pelo largo, no tengo a quien echarle la culpa del tiradero de cabellos por toda la casa. Aún no me salen canas, y eso no es tan bueno porque de salirme me las pintaría de morado.

Con la novedad que ronco, sí, como trailer de bajada, acabo de ver un video de este fin de semana, y me cagué de risa. En otra época podría haber colgado de los dedos chiquitos de los pies y crucificado de cabeza a quien lo grabó, sobre todo porque aparezco sin maquillaje, babeando la almohada y en calidad de bulto ¡y yo pensando que dormida me veía igualita a la Bella Durmiente… pero Dios mío, que manera de roncar! A mi favor puedo decir que estaba dormida y no sabía lo que hacía, el día que ronque despierta, ese día critíquenme.

 Ya es más difícil bajar de peso, me han advertido que debo comenzar a querer mis lonjas porque va a ser casi imposible deshacerme de ellas.

 Y eso será tema pora otro post: el hambre atroz que me embarga cada vez que intento ponerme a dieta, como si mi cuerpo y mi alma se estuvieran resistiendo a envenenarse con fibra, lechuga sin aderezo, verduras cocidas, pechuga al vapor y atún en agua.

La rola de hoy…  mi Rola, "La Descarriada", ¿hay quien la haya escuchado completa? simplemente me encanta!!!!




bueno, les dejo la parte del brindis, interpretada por mi cantante favorita Tarja Turunen, ex vocalista de Nightwish, el mejor grupo finlandés de power metal.




P.D.  A alguien en el feisbuc no le gustan mis post y marcó los links como contenido ofensivo… weeeeey, que les doy material para que me critiquen y todavía se quejan, caramba!! Uno nunca le da gusto a nadie!


jueves, 21 de junio de 2012

Segunda parte: Aapi-usho



En el capitulo anterior... que hueva, si no te acuerdas, regresate y leelo otra vez.



Prosiguiendo:

Mi Papá es genial, sí, se la pasa de genio todo el tiempo. Regularmente se pone de malas cuando no puede tener el control total de las situaciones, y en eso de ponerlo de genio yo soy toda una experta.
Pero mi papá también tiene un lado muy agradable, un lado “carrilla”, sobre todo cuando yo no soy el blanco de sus indirectas. Es común que estando en un lugar concurrido, en el templo a la hora de misa, o en la antesala de un evento, a mi papá se le salgan expresiones como: “con esos tacones camina como gato espinado”, “se peinó al estilo ‘prendí el boiler’ ”, “no recordaba que hoy es día de vestirse ridículo”, “si canta cuando se baña, que cante mas seguido”







 si, ya se que está cortada también, pero no le puedo hacer de otra forma


A veces hace bromitas, como el día que recién acababa de llover y me pidió que me parara debajo de un ficus, se retiró y con una patada lo sacudió, mojándome toda. En unas vacaciones en manzanillo, mi papá le pidió a mamá que posara para la foto junto a un peñasco, de espaldas al mar, y mi papá esperó maliciosamente a que golpeara la ola. La ola casi revolcó a mi mamá.

Mi papá es muy “Pata” para manejar, 45 minutos de Guanatos a Liondres no me dejarán mentir. Ni tampoco las llantas reventadas, las cuales no estaban hechas para correr a más de 150. Mi papá lo comprobó… tres veces.

Hace muchos años, yendo en carretera con mí hermano, a mi papá se le ocurrió rebasar, y al que venía de frente también. La cosa se puso peligrosa con cuatro coches en posibilidad de empatarse en cierto punto, así que en cuestión de milésimas de segundo mi hermano le gritó “—rápido mete y saca el clutch”, lo cual ocasionó que se revolucionara el coche para alcanzar a rebasar y esquivar al que venía de frente. Después de que respiraron aliviados por haber prevenido el percance, mi papá reaccionó ante lo inusual de la maniobra preguntándole a mi hermano: —bueno, ¿y tu donde aprendiste a hacer eso?-, a lo que mi hermano contestó: —esteeee, lo vi en un programa.- Y mi papá le dijo: —pues a ver si dejas de “ver programas con mi coche.”- Después de eso, mi papá se convirtió en un experto para “rebasar clutcheando”

 Recuerdo cuando niña que mi papá siempre tenía mucha energía, y eso me desesperaba, porque todo el tiempo estaba haciendo algo, y quería que nosotros estuviéramos activos también. Se levantaba tempranísimo, se acostaba tarde y durante las pocas horas de la noche que permanecía en su cama, escuchaba noticias de otros países en su radio de onda corta… —papaaaa, apaga tu radio, solo se oye estática, ¿Por qué no lo escuchas en el día?. Y él me contestaba: —cuando aquí es de día en China es de noche y no hay noticieros.

 En una ocasión, en una ocasión de muchas, estaba harta de que nos despertara muy temprano… y es que él argumentaba que entre más temprano, más cosas podríamos hacer. No sabía hasta que punto era su afán por “hacerlo todo y ganarle tiempo al tiempo”, hasta que un lunes a las cinco de la mañana nos sacó de la cama con la frase “—apúrense, pasado mañana es miércoles, ya se nos fue la mitad de la semana y no hemos hecho nada.”

Todo el asunto se resolvió cuando mi papá le entró a la onda naturista y el nutriólogo le pidió que tomara 10 vasos de agua al día, en sustitución a sus 10 tazas de café diarias. Ahora es como las personas normales que se quedan dormidas cuando van a misa.

Como su primogénita, era mí deber ser un ejemplo a seguir, tenía que ser la mas lista, las más linda, la más capaz, la mejor, esto me parecía sumamente agotador y estresante. No supe como manejarlo y decidí hacer todo lo contrario a lo que él esperaba de mi, y por ese motivo llegó un momento en el que nuestra relación se volvió muy tensa, las peleas eran agotadoras y las discusiones interminables, me enfermaba que él siempre fue mas listo que yo, que tuviera la razón y se saliera con la suya.

Así que me desgastaba enormemente ideando formas de desquitarme: Una vez le pedí que me dejara manejar su coche nuevo para llevarlo a trabajar, y él me dijo muy seguro: --no vas a manejar mi coche hasta que tengas una licencia de conducir. Lo que él no sabía era que yo ya sospechaba que me iba a decir eso, así que me había adelantado, enseñándome a manejar tomando clases por correspondencia, y a escondidas fui a sacar mi licencia de manejo. Entonces cuando me dijo eso le mostré (en su cara) la licencia, y no tuvo de otra más que decirme: --sube, y con cuidado por favor-, mientras fruncía el ceño y se recorría al asiento del copiloto. Así es, me enseñé a manejar por correspondencia, a un amigo le tocaba enseñarme a manejar y a mi me correspondía pagarle.

 Después saqué un duplicado de la llave de su coche, y cuando se dio cuenta, se enojó tanto que entre tanta ira sus gritos no se entendían, y se enojó todavía mas cuando me rehusé a entregarle el duplicado… tres días después, muy temprano por la mañana tocó la puerta de mi cuarto para por favor pedirme amablemente que le prestara mi llave…porque había dejado calentando el coche, y se salió por la puerta del copiloto.

Conforme pasó el tiempo nuestras discusiones subieron de tono, yo seguía sin cumplir con sus expectativas (y hasta la fecha), y a él le desesperaba que yo estuviera echando a perder mi vida con mi novio en turno (y eso que no se enteró de lo que pasó en el velorio de la abuelita, bueno eso creo yo).

Para cuidar mi reputación, (o lo que quedaba de ella), mi papá me prohibía ir a cualquier lado, y menos con mis amigos. Tenía que estar en la casa antes de las 10 de la noche. Por lo anterior, a veces a la hora en la que todos estaban bien dormidos se escuchaba un grito a media calle: - caifaaaaaaaaaan.

En cuando lo escuchaba yo bajaba descolgándome por la pared de atrás y me brincaba la cerca, para luego preguntarle al Caifán mientras me subía a su coche: -wey, ¿Por qué me gritas Caifaaaaaan?, si el Caifán eres tu?
- Ah ps es que si grito Eeeeeeeemmyyyyyyy, va a salir tu papá con un rifle a dispararme.
-ah pos si wey, órale, vámonos al reven… 

Realmente era más lo que mi papá "mal pensaba" que lo que sucedía en realidad. Sí salíamos a echar desmadre, sí salíamos a cotorrear, pero como dice mi compadre Maleno: —podríamos haber sido, más desmadrosos, más borrachos y más alocados.


Y yo pienso, bueno Papá, apliquemos la filosofía de Susanita: Lee la nota roja en el periódico, compara, y entérate de lo buena que soy.

Era tal la desesperación de mi papá que para hacerme reaccionar me gritó un día: -- ¿acaso no te das cuenta? ¡Te pueden confundir con una prostituta! A lo que yo impulsivamente contesté: -¡claro que no, yo no cobro! Dejamos de hablarnos y meses después me fui de su casa.



Pasaron muchos años para que nos dirigiéramos la palabra nuevamente. Pero las conversaciones no duraron mucho, ya que en una plática expresó su preocupación acerca de “esos pobres individuos desubicados que se hacen tatuajes” …y yo corrí de volada a hacerme uno, así que como gesto de desagrado volvió a guardar silencio. 

Como que medio se le veían las intenciones de hablarme nuevamente, pero me evitó por completo cuando le dije: - Papá, vas a ser abuelo o abuela, es que no se si voy a tener niño o niña :P



que no se me acercaaa, saaaaaabeeee


Y es que aunque se lo haya dicho así, no le pude arrancar una sonrisa, ni siquiera una expresión ni de sorpresa, ni de asombro, de hecho ya se lo esperaba desde que me fui de su casa, no espera, ya se lo esperaba desde mucho tiempo atrás. Supe que estaba semi-perdonada o que él estaba semi-resignado, cuando le dije: -Papá, ya no rentaré mas, ya tengo casa propia, y la pagué de  contado.

  Aún no me ha perdonado del todo, y cualquier padre en sus cinco sentidos no me perdonaría nunca mi comportamiento, bueno, tal vez si fuera hija de Ozzy Osbourne él se sentiría orgulloso de mí. 

Pero bueno, dije cualquier padre “en sus cinco sentidos”, así que Ozzy no cuenta.








  Todavía espero que un día me perdone por todo, pero estoy casi convencida de que nunca me perdonará, será mas fácil que me cambie el nombre a Diana Gabriela, y así será feliz.




Foto Original, con Diana


Papá: bueno, de antemano sé que no te interesa leer mi blog, pero si un día ves esto, aclaro que me dijiste rotundamente: -no quiero que vayas a subir fotos mías a tu cochino Facebook.- Así es, a mi cochino feisbuc, pero de mi blog no dijiste nada =P

 ¿Y por qué “Api usho” ? ah, es porque cuando yo era bebé y no sabía hablar, era la manera de decirle a mi papá: “Papi, te quiero mucho”.

   La rola de hoy: una de sus baladas favoritas, la tradujimos juntos hace muchos años y nos peleamos al darle significado a dos o tres palabras que con la traducción literal no tenían sentido.





pd. Shakira, no hagas el ridiculo, que Metallica jamás cantará "loca con tu tigre"



jueves, 14 de junio de 2012

Primera parte: El Hombre que más me ha amado...

Todos mis problemas comenzaron cuando tuve un enamoramiento precoz con un
hombre mayor que yo, (acepto que los hombres mayores siempre me han llamado
más la atención). El nació un 7 de noviembre, (no Carlos, no estoy hablando
de ti), es alto y moreno, (no Carlos, de verdad no estoy hablando de ti), y
lo quiero muchísimo, además podría decir que es el hombre al que mas he
necesitado en mi vida, (que no Carlos, te aprecio mucho, pero no estoy
hablando de ti). Él tenía 23 años cuando yo llegué a su vida, (de verdad
Carlos, no eres tú), y ahora a sus 53 años tiene la cabeza poblada de canas,
(verdes) y esas se las saqué yo solita (¿te quedó claro Carlos, que no eres
tu?).

¿Quién es el hombre que mas me ha amado? No me salgan con que Jesús -
Cristo, tampoco me hablen de Jesús – Pisto y no, no es Carlos: Estoy
hablando de mi Papá.

Podría decir que mi papá es alegre, cálido, muy amoroso, buenísima onda,
súper alivianado y tremendamente sarcástico, y en efecto así es. Sin embargo
todas estas características las sabe disimular muy bien tras una apariencia
de autoritarismo, frialdad, seriedad y mal humor.

Desde muy joven me dí cuenta de que todos los hombres son iguales: pelmazos,
huevones, tarados, irresponsables, borrachos y putos, todos menos mi papá, y
si lo dudan, pregúntenle a mi abuelita.

Mi papá es un hombre muy trabajador, responsable, cumplido, dedicado, buen
marido, organizado, formal, comprometido. Nunca se levanta tarde, bebe
moderadamente, (nunca se ha emborrachado), no fuma, no es flojo, hace
ejercicio. Tiene como prioridades a su esposa, su familia y su trabajo. Mi
papá es gentil, caballeroso, listo, autodidacta, inteligente, educado y
cariñoso. Sabe de deportes, de máquinas y herramientas y es un experto para
hacer reparaciones. Es un as del volante, sabe cocinar, le encanta viajar.
Procura cultivar su mente, su cuerpo, su alma y su espíritu…  así que con
esas características, mis expectativas con respecto al hombre ideal son
altas, muy altas, tremendamente altas…altísimas!!

Y para mi papá, sus expectativas con respecto a mi son altas, muy
altas…imposibles diría yo.


Si, ya se que está cortada,
pero lo tuve que hacer
 porque mi papá no se me acerca
El momento más feliz que viví con él fue a los once años cuando estaba en segundo de secundaria. Yo era una genio para la química, y mi papá estaba experimentando con mezclas de no se qué material para hacer suelas. Cuando me mostró los componentes, le expliqué paso por paso cómo hacer las
ecuaciones con el método Redox… no me pregunten qué es eso, porque ahora ya no tengo niputaidea. Pero creo que en ese momento mi papá se sintió orgulloso de mí.

Luego ese orgullo se perdería por completo: todo iba bien, pero lo decepcioné tanto cuando dejé la prepa, que creo que ni volviendo a nacer puedo devolverle lo que antes sentía por mi.

Cuando abandoné la prepa, para no tenerme sin nada que hacer, mi papá me insistía mucho en aprender inglés, y yo me negaba rotundamente a hablarlo, no le veía el caso, a parte me daba mucha flojera. Compró los libros del Follow Me, y consiguió los videos que luego grabó en formato Beta, (Dios, ¿cuando fue eso?, ¿hace 18 años?), sin embargo yo me seguía negando, mas por terquedad que por otra cosa. Luego, de manera muy ingeniosa, compró las revistas de Guitarra Fácil de los Beatles porque traían las letras de las canciones. Con eso, era imposible que me resistiera, así que en veintidós días ya me había aprendido todas las canciones… y le salí mas barata porque
con mi hermana la mediana no funcionó, a ella le tuvo que pagar clases en el Boston…Con lo que él no contaba era que me llamara la atención aullar las
canciones y aprender a tocar la guitarra, así que después de eso me estaría
gritando que callara mis desafinados acordes que salían de una guitarra
vieja, mas chueca que la campaña de AMLO y mas mentirosa que Pinocho.

Luego me dio por mi época de niña cantante, y una vez que estaba cantando en
la privacidad de mi cuarto, llegó mi papá y con una patada tiró la puerta
para regañarme: -cállate, tienes voz de sirena.
Yo me sentí dichosa de que mi papá se diera cuenta de mi privilegiada voz,
hasta que aclaró: -si, de sirena de ambulancia.

Ok Papá, ¿quieres que deje de cantar? Perfecto: así que decidí perforarme la
lengua, lo cual me llevó a casi tres semanas de silencio y posteriormente a
inventar nuevas palabras: -papá, edes un cuadaado,  odio que me degañes,
no me padece coddedto.

Mi papá me regañaba cuando ponía música, me increpaba acerca de los “sonidos
satánicos” que emanaban de mis grupos favoritos de ese momento: Metallica y
Guns n’ Roses… ja! como si ambos grupos fueran oscuros, densos y
estridentes. Así que un buen día, para ejemplificarme la buena música, sacó
de del estuche lo que creía que era un cassette  de Paul Mauriat  (ja!
cassette, imagínate hace cuanto pasó eso), Mi papá no contaba con que yo
había desordenado las colecciones, así que las cintas no correspondían a las
portadas. Cuando le puso play, se empezó a escuchar una melodía que él no
esperaba: Iron Man, de uno de sus grupos favoritos…Black Sabbath.

Así es, mi papá, temeroso de que me fuera a gustar la onda “rockera rebelde
sin causa”, trató de mantenerme alejada de sus grupos favoritos: Deep
Purple, Black Sabbath y Led Zeppelin, sin saber que mi obstinación me
conduciría años mas tarde a volverme primero una “suicida chica grunge” y
luego una darketa sin oficio ni beneficio.

En mi época de prepa una vez me dio por escuchar a Green Day, y mi papá los
apodó  “a menudo”, sí “-a menudo me aburre el sonido, todas las canciones
suenan igual-”.  Sin embargo un día se emocionó cuando escuchó comenzar la
canción Brain Stew…



y él, emocionado, comenzó a cantar 25 or 6 to 4: -no Papá, no son Chicago.



Mi papá no dejó de criticarme por mis gustos musicales, se enojaba cuando
veía descargada música de Dimmu Borgir en su compu, y una vez, mientras yo
tenía en las manos un cd de “los éxitos (decentes) de Chava Flores”, puse de
pretexto la música popular diciendo que “eso era pura shit” y con tal de
contradecirme me dijo: -pues siquiera descargaras música de Chava Flores.

Perfecto!!! me excusé diciendo que “mi papá me dijo que descargara Chava
Flores”, para después cantar con tremendo gusto en las reuniones familiares
“El Chico Temido” y “los Frijoles de Anastasia”.

Aunque por mucho, mi canción favorita es “La tienda”


Cuando mi papá estudiaba alemán, según para practicar, escuchaba a
Rammstein. Hace poco empezó a estudiar hebreo, si saben de algún grupo por
el estilo que cante en hebreo me avisan porfas.


Mi papá salió adelante por sus propios medios, desde muy joven demostró su
voluntad férrea sobreviviendo a una peligrosa cirugía a corazón abierto. Y a
base de constancia, sacrificio y trabajo arduo se empeñó por darnos
educación a sus hijos con el objetivo de que no pasáramos por las mismas
penurias que el tuvo que soportar para convertirse en alguien exitoso. 

Me insistía mucho en canalizar mi inteligencia hacia algo productivo, lo
decepcioné mucho cuando decidí no estudiar alguna ingeniería. La verdad
estaba desubicada, y encontré mi vocación cuando a mitad de mi carrera y
después de rogarle muchísimo me llevó a ANPIC y yo quedé encantada, ahí le
dije: - ¿ya ves?, si me hubieras traído antes, yo hubiera escogido estudiar
Ingeniería Industrial, y no la carrera que estudié- , y es que me insistía
para que me convirtiera en Ingeniero Industrial, o Ingeniero Mecánico, o
Ingeniero en lo que fuera, a la de perdida QFB, LAE, CP o LRI. Sin embargo,
después de darle muchas vueltas al asunto, ahora deduzco que en realidad,
aunque terminé como LPO y actualmente estudio M. en D.O.,  él esperaba que
yo estudiara MMC (Mientras Me Caso), pero mi obstinación por “yo solita
puedo”, me llevó a batallar un poco:

En el segundo cuatrimestre de la universidad, mi papá se preocupaba mucho
para que no dejara los estudios, a él le angustiaba que prefiriera trabajar
para luego abandonar la escuela, lo cual era lógico que le angustiara porque
yo ya tenía el antecedente de deserción escolar en la prepa, así que cuando
comencé a trabajar a los 17 años, a él no le pareció nada conveniente. Yo
mantenía una agenda bastante ocupada: me acostaba tarde haciendo tareas, me
levantaba temprano para ir a trabajar y durante el día me la pasaba
ajetreada entre el trabajo, la casa y universidad. Mi intención era seguir
trabajando, así que para disuadirme de mi intención y forzarme a enfocar
toda mi energía en los estudios, a mi papá se le ocurrió la maravillosa idea
castigarme con el látigo de su silencio y de llevarnos a misa de 7 de la
mañana el domingo, que era el único día que tenía para descansar… lo odié
por eso,  y aunque ya no me hablaba no dejé de trabajar, ni de ir a la
universidad, ni de levantarme temprano. Luego vio que a pesar de estar
trabajando, realmente le estaba echando muchas ganas a la escuela y no tenía
intenciones de dejarla, así que ahora la colegiatura ya tenía que salir de
mi sueldo. Mi hermana mediana si la supo hacer, después de dos años
sabáticos se metió a la universidad, y se la pachangueaba re- sabroso porque
mi papá le pagó la escuela, pero porque ella sí estudió algo decente…¿su
carrera? Ingeniería Industrial con un post grado en Gestión de la Calidad,
(claro que en versión MMC porque no ejerce).

Sin embargo años más tarde me sentí satisfecha: mi papá tenía que ir a
levantar a  mi hermana la mediana todos los días para llevarla a la
universidad, y una vez le dijo: -A Emmy no tenía que andarle diciendo que
se levantara, ella  era responsable.

Y a más recientes fechas también me pone como ejemplo con mi hermana la más
chica: -Tienes que comprometerte, establecer tus prioridades en la vida,
comportarte decentemente… ¿o que?,  ¿acaso quieres ser una fracasada como tu
hermana Emmy?

Bueno, por lo menos sirvo de algo: de mal ejemplo.


Próximo Jueves, segunda parte. Mi papá es algo magnífico, asi que tenía que dedicarle por lo menos dos posts!!

jueves, 7 de junio de 2012

La foquin mentira

Cuando estoy reflexiva me tapo la nariz para no distraerme
En estos días he estado muy reflexiva, cambié en estas últimas semanas el vino blanco por vodka y mis neuronas descubrieron nuevas interconexiones que me llevaron a crear ideas y deducir axiomas, axiomas maquiavélicos, pero axiomas a final de cuentas. Este nuevo esquema de pensamiento surgió a partir de modificar mis paradigmas por medio de situaciones simples, todo comencé a verlo desde un punto de vista diferente cuando hace algunos días amanecí con la cara pegada al piso de mi cuarto, eso fue porque quería romper el paradigma de dormir en la cama para poder experimentar un nuevo ángulo de apreciación. No pienses que fue porque mi estado etílico me impidió llegar hasta el colchón. No estoy mintiendo.


Axioma maquiavélico: “un aspecto inherente al ser humano es la mentira”, corrijo, es la “foquin mentira”. Todos mentimos, nadie se escapa de mentir y a mi favor digo que “la responsabilidad de la mentira es de los que se la creen” y éste es otro axioma maquiavélico.

Las mentiras son parte de la vida diaria, desde el “dice mi papá que no está”, hasta “ya leí todos tus posts”, pasando por el “luego te pago”, y el “te creo mi amor, y tu eres el único” en respuesta al famoso “te juro que no te estoy poniendo el cuerno”.

¿Como me vería la gente que me rodea si todo el tiempo estuviera hablando con la verdad? Sin lugar a dudas sería un bicho raro, y curiosamente cuestionarían mi credibilidad, y esto es porque para hablar con la verdad estaría dejando de lado mi miedo a ser rechazada, aislada o juzgada, y eso es sinónimo de volverse muy fuerte (o de estar muy pendeja, o de estar muy borracha).

Aparentemente ganamos más mintiendo: nos protegemos y podemos sacar ventaja. Cosa contraria a hablar siempre con la verdad: desnudar el alma, volverse vulnerable ante los demás y perderlo todo. Por ésta y muchas cosas más es muy fuerte la necesidad de mentir: ocultar nuestras verdades para que nadie pueda conocer nuestra alma al desnudo y con esto evitar ser heridos.

Otro axioma maquiavélico: “mentir no es cuestión de maldad… es cuestión de supervivencia”

Aparentemente al mentir le estamos ganando ventaja al mundo, y a veces es el mundo el que nos saca la ventaja. Y cuando el mundo se da cuenta de que mentimos, no nos queda de otra más que morir de la pena, o de plano caer en el cinismo (prefiero la segunda opción).



Mentir, engañar, pa’l caso es lo mismo, y al mentir he pretendido engañarme a mí misma, y nunca lo he logrado porque hay un axioma maquiavélico que dice que “nada queda oculto bajo el sol porque si lo sabe Dios, que lo sepa el mundo”. Es por lo anterior que ya prefiero portarme bien y no tener algo de lo cual avergonzarme, pero como dice mi mamá que yo no tengo vergüenza…

Eso de echar mentiras me recuerda que precisamente para estas fechas, hace algunos años, que no deben ser muchos, en una etapa situada no recuerdo si en el ’98 o el ‘99, a la prima de una amiga, la que tiene almorranas, por echar mentiras le sucedió algo, pero a la fecha ya lo puede platicar sin morirse de la pena y con un tono algo cínico:

Estaba estudiando los primeros cuatrimestres de la universidad, en el turno nocturno, y su novio llegó apresurado al salón para sacarla de clase con una impactante noticia: su abuelita había fallecido esa tarde, así es, la abuelita del novio había muerto.

Mientras lo abrazaba tiernamente para consolarlo, sus neuronas se interconectaron y un maquiavélico axioma se fue gestando dentro de su retorcida mente: el sexo, digo, el fin justifica los medios… (Abuelita muerta - velorio – sus papás le darán permiso de pasar la noche en el velorio de la abuelita – en la casa del novio no habrá nadie porque todos estarán en el velorio – convencer al novio de ir a su casa – sexo – toda la noche)

Cuando el novio terminó de abrazarla la miró a los ojos, y secándose el llanto le dijo: sabes, estaba pensando que tus papás tal vez te den permiso de acompañarme al velorio de mi abuelita, y si te dejan ir, ¿Qué te parece si mejor nos vamos a mi casa?, no habrá nadie, pondré de pretexto que tengo que estudiar y pasaremos la noche juntos…

En ese momento sonaron campanas celestiales y casi juraba que le tintineaban el estribillo de “Let´s spend the night together” de los Rolling Stones.



Arregló todo, y después de haber convencido a su mamá haciendo su mejor cara de “gato de Shrek” se puso unos “pantis bien setsis” y se fueron a dormir a la casa del novio…pero esa noche no durmió, y los vecinos de las casas aledañas tampoco. Dios Bendiga a ese muchacho, (y a la Pizza también).

Todo iba bien, y a la mañana siguiente estaba dispuesta a irse cuanto antes para evitar sospechas, pero él la convenció de bajar encuerados a la sala para ver la tele matutina mientras se comían una pizza en el desayuno.

Repentinamente escucharon que los papás abrieron la puerta de la cochera y como alma que lleva el diablo subió las escaleras para esconderse en la habitación de su novio antes de que los papás se dieran cuenta de que ella estaba ahí.

Entraron sus papás a la casa y de tan desvelados que estaban no repararon en los detalles que hacían notar que alguien había comido pizza en su sofá. Se acomodaron en la sala para descansar y eso hacía imposible que ella saliera sin ser vista. Así que ella y su novio decidieron esperar a que se fueran los papás para poder irse y para matar el tiempo decidieron concluir en absoluto silencio lo que dejaron inconcluso en el sofá de la sala. Cuatro horas más tarde, los papás decidieron regresar al velorio, llevándose al novio con ellos. Todo iba bien, el novio le dio su juego de llaves para abrir el portón una vez que se fueran y poder salir sin ningún problema.

Una vez que escuchó que cerraron el portón, esperó quince minutos para bajar las escaleras y dirigirse a la salida. El problema fue que no pudo abrir la puerta con las llaves que le dejó su novio. Así que se quedó encerrada. No se preocupó tanto, esperó otros quince minutos para marcar desde la casa el teléfono de la casa de la abuelita difunta. (en ese entonces no era tan fácil mantener un celular y ninguno de los dos tenía). Su plan era hablar con el novio para que fuera a su rescate antes de que sus papás se dieran cuenta de que se había quedado encerrada en su casa después de haber tenido una fabulosa noche y una fenomenal mañana.

Marcó despreocupadamente el número de la casa de la abuelita muerta, y le contestó uno de los tíos. Pidió amablemente que la comunicara con el novio…

Si, aquí está él, ¿quieres que te lo comunique?
Por favor, señor, si fuera tan amable...
En un minuto, solo dime, ¿en donde estas ahora?
Pues… en mi casa señor.
¿Segura? porque aquí tenemos identificador de llamadas y el número de donde estas marcando es el de la casa de mi hermano…hummm, te comunico a mi cuñada.

Minutos más tarde, su suegra fue por ella a sacarla de la casa. Nadie le cuestionó nada, era más que obvio que todos en la familia habían descubierto su plan y para la familia entera fue un momento sumamente incómodo, más incómodo para la familia que para ella porque ella ya no tenía nada que perder, ni siquiera su virginidad, esa ya la había perdido. Y no se sintió avergonzada porque no le importaba cumplir con las expectativas que la familia de su novio tenía sobre ella. Inclusive sintió más pena el día en que la abuelita del novio la descubrió arrodillada frente a él en su cocina, y sintió más pena ese día porque la abuelita, que en paz descanse, le caía bien.

Estoy de acuerdo con el brutalmente honesto Doctor House que dice que todos mienten. Sí, así es: todos mienten, hasta la prima de una amiga que tiene almorranas. Y yo siempre digo la verdad, saaaaaabe.

Para mi es estresante ir por la vida desconfiando de las personas, pero es necesario, yo no confío en la gente como para dejar las llaves pegadas en el coche, ni dejar dinero a la vista, ni firmarle de aval a cualquiera (definición técnica de aval: “pendejo con bolígrafo”).

Reconozco que en ocasiones le he mentido a mis seres amados: a mi hija, a mi madre, a mi padre, a mis hermanos, a mi nutrióloga y a mis amigos. Y les he mentido porque sé que no cumplo con las expectativas que tienen sobre mí, así que por eso pretendo engañarlos. Y a veces cuando digo la verdad, no me creen. Por lo anterior les ratifico que tras haber tomado terapia ya puedo hablar con la verdad muchas situaciones de mi vida, y éste acto, querida psicóloga carera, no es “toma de conciencia”, es cinismo =P

Mi La Re Sol: no creas que hago como que la virgen me habla, es solo que pienso demasiado mis respuestas… y dejaré de hacerlo porque ya vi que es casi imposible ganarte una discusión.

Mi mamá siempre dice “piensa mal y acertarás”. Y aplicando ese axioma maquiavélico, cuando mal pienso siempre he acertado. Por eso ya no quiero pensar mal de la gente que amo, porque prefiero vivir feliz a tener la razón.

Vivir desconfiando de la gente a la que amo es sumamente desgastante. Si se supone que nos amamos, no tenemos por qué mentirnos…o será precisamente que por eso mentimos: para evitar lastimarnos al no cumplir las expectativas que tenemos uno sobre otro… pero, ¿si tenemos que cumplir expectativas entonces no hay amor?, y además, ¿si tenemos que exigir cuentas de lo que hacen nuestros seres queridos…tampoco hay amor?

Al amar a mis seres queridos, les estoy entregando toda mi confianza y estoy creyendo en ellos. Los amo, y el amor es incondicional, sin requisitos, sin la irresistible necesidad de que ellos tengan que hacer, decir y actuar como yo digo con el propósito de hacerme sentir bien. Y es por eso que no tendrán que mentirme nunca más, porque no habrá expectativas que les exija deban cumplir ante mí. Bueno, en teoría, en la práctica luego me agarra la locura y me pongo bien intensa… y ese será tema para otro post.
Parafraseando a mi amiga Betsa CuleroConnor: faltan nueve días para mi cumpleaños, por si estaban con el pendiente…

La rola de Hoy tenía que ser La Rola, y ahora que la escucho después de chorrocientosmil años, no es nostalgia, sé que de verdad tiene significado.


I'll never find anyone to replace you... Guess I'll have to make it through, this time - oh this time Without you... I knew the storm was getting closer... And all my friends said I was high.. But everything we've ever known's here... I never wanted it to die.